Más o menos por enero, escribí la reseña de Jormungand. Creo recordar que lo elogié bastante. últimamente, en cambio, no he consumido ninguna ficción japonesa de ese estilo, realista violento, al menos, uno que intente serlo. Más bien, me he decantado por aquellos productos que pretenden ser útiles para el que los lee. ¿Sabían que hay un manga que explica las ecuaciones integrales y diferenciales? De la misma forma, que Silver Spoon introduce en la vida de una granja japonesa. Y, en medio de estas lecturas. hace unos días vi entero el anime de Spice and Wolf, que tiene un título asqueroso pero es una obra llena de calidez y sentido del humor.
La historia trata de lo siguiente: una de las deidades antiguas deidades que cuidaban de las tierras de los paganos (ahora conversos al cristianismo) decide irse del lugar donde ha residido por cientos de años con el objetivo de volver a la tierra que la vio nacer. Una noche, mientras un mercader, Lawrence, sale del pueblo en que se encuentra con un cargamiento de pieles, se introduce en el carro y se esconde. Al descubrirla Lawrence, le pide que salga y ella le muestra su naturaleza. Juntos emprenden un viaje hacia las tierras del norte, y nos meten en el mundo de las transacciones comerciales anteriores a las sociedades mercantiles modernas, a una especie de período tardo-medieval, aunque más bien pre-renacentista, gótico tardío tal vez, en el que los gremios, la iglesia y la nobleza se reparten en oro.
Bien, a poco que hayan estudiado historia, saben que durante el renacimiento (siglo XV) e incluso antes, la burguesía empieza un ascenso lento aunque imparable hacia el control de la sociedad, que culmina en el siglo XIX en la época de la segunda revolución industrial, en el que irrumpe el nuevo estado alemán, unido bajo el comercio y los laxos culturales, y en el que la nobleza se encuentra en una fase de desintegración importante, junto con los antiguos imperios europeos que se abocan a la primera guerra mundial. Bien, durante todo ese tiempo, los burgueses controlaban una buena parte del mundo, aunque no estaban entre la élite social, una vez destruido l'anciene régim, su trascendencia crece imparablemente. Las relaciones actuales entre burguesía y poder y las nociones que tenemos de ellos son muy distintos de los que tienen los europeos, o al menos, de los europeos que se muestran en Spice and Wolf.
Por que sí, los personajes son, sin duda, europeos. He dado un poco la murga con el párrafo anterior para introducir el hecho de que, en Spice and Wolf, las principales fuerzas con las que tienen que lidiar los protagonistas son: los nobles, el poder feudal, los reyes y las sociedades de mercaderes, los gremios.
Por supuesto, ahí es donde brilla todo. Para empezar, explicando conceptos sencillos de economía, que aunque hoy en día no sirven de nada, recordaremos aquí: el patrón de su economía es el oro. Tanto oro hay, tanto vale el dinero que tienes. El valor del dinero fluctúa según la cantidad de monedas que hay en circulación; es de lógica, si todo el mundo tiene dinero en cantidad, entonces tú dinero vale menos. Por eso advierten en varias ocasiones que se adulteran las monedas, bien falsificándolas, bien cambiando el contenido en plata que cada una de ellas tiene. Aparte de eso, dan unos ejemplos muy someros de cómo una persona puede adelantarse a los acontecimientos y prever el descenso en el valor de una divisa, y de cómo las propias instituciones que rigen el sistema pueden manejar el mercado, falseándolo para invertir ellos mismos y ganar beneficio.
Este tipo de cosas hay que enmarcarlas en ese microcosmos de relaciones entre poder: la iglesia, desde tiempos muy antiguos, ha permitido o impedido en ciertas ciudades (capitales europeas donde tenían una catedra importante) el flujo de oro, dependiendo de la relación que mantengan con el rey o el emperador, con el objetivo de mantener en el poder un régimen que los apoye. La iglesia ha estado llena de algunos de los mejores gobernantes de la historia; ha prohibido el deseo carnal, ha retrasado la entrada al cielo (en serio, según Juan XXII, todos los muertos de la historia de la humanidad están así, esperando, a que llegue el Apocalipsis), se ha sentado a esperar a que sus rivales se destruyan, ha utilizado potencias en su favor... el relato que se hace en el anime es algo exagerado, pero desde luego que no anda tan lejos de la realidad, y no está tan mal que echen mano de ello para retratar la situación.
Creo que ya hemos dado suficientes para remitirlos a la obra en cuestión: en resumen, estamos hablando de un anime de 2009, muy corto, muy bueno, que seguramente muchos hayas visto, pero que vale la pena reseñar para los que no lo hayan encontrado aún.
